Según el Ministerio de Educación (Minedu), en 2025 se habilitaron 48.000 vacantes gratuitas en institutos públicos para carreras técnicas con alta empleabilidad. Esta estrategia refuerza que la formación técnica es una apuesta concreta por el empleo más que por la formación académica tradicional.
Un análisis reciente del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) y el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) revela que los egresados de institutos técnicos alcanzan una tasa de empleabilidad cercana al 65 % en los seis meses posteriores a su graduación. Esa cifra es significativa: confirma que la formación técnica permite un acceso más rápido a empleos reales, en especial dentro de industrias que valoran competencias prácticas y tareas operativas.
En paralelo, el MTPE ha reportado que la demanda anual de técnicos en el país es mucho más alta de lo que muchas instituciones están produciendo. Según fuentes citadas en medios empresariales, se requiere aproximadamente 300 mil profesionales técnicos al año, pero solo egresan cerca de 100 mil. Esa brecha evidencia un desajuste estructural entre la oferta educativa técnica y las necesidades del sector productivo.
Es en este escenario que el Instituto de Educación Superior Privado John Von Neumann, con sede en Tacna, cobra protagonismo. Su modelo educativo técnico-profesional está alineado con lo que el mercado exige: ofrece carreras como Administración de Negocios Internacionales y Contabilidad, con un enfoque práctico y adaptado al contexto empresarial local y nacional. Gracias a la formación por competencias y a la obtención de certificaciones progresivas durante el ciclo de estudios, los estudiantes pueden demostrar habilidades concretas antes incluso de graduarse.
Según información institucional del Neumann, un alto porcentaje de sus egresados logra empleo en pocos meses tras terminar sus estudios. Esa rapidez de inserción se explica no sólo por la formación técnica, sino también por la naturaleza de sus programas: combinan teoría y práctica con tareas muy orientadas a procesos reales —desde la gestión de operaciones hasta la atención comercial, pasando por análisis de datos y cooperación internacional.
Además, la infraestructura de Neumann y su red de convenios con empresas de Tacna y otras regiones facilitan que los estudiantes accedan a empleos desde temprano. La institución mantiene conexiones con organizaciones que necesitan personal técnico-calificado, lo que permite que una parte de sus egresados obtenga puestos de soporte, coordinación o asistencia administrativa poco después de finalizar su formación.
A nivel social, Neumann impulsa el acceso a este tipo de educación técnica con becas relevantes: sus programas “Beca Impulsa” y “Beca Trasciende” permiten que jóvenes de áreas vulnerables en Tacna y Moquegua accedan a estudios técnicos con mayor facilidad. Este enfoque contribuye a cerrar la brecha educativa y a formar profesionales que, al egresar, tienen reales posibilidades de contribuir al mercado local.
Para estudiantes que consideran una carrera en negocios, administración o contabilidad, estudiar en un instituto técnico como Neumann ofrece una alternativa rápida y eficaz para incorporarse al trabajo, con una formación alineada a lo que las empresas están buscando ahora. La realidad de las tasas de empleo para técnicos, apoyada en datos oficiales, indica que no solo es una opción viable, sino una ruta con alto potencial de retorno profesional.